El congreso nacional de TD se llevará a
cabo los días 20 y 21 de febrero de 2016 en la Ciudad de Buenos
Aires. Se inscribe en las deliberaciones hacia el XXIII° Congreso
del Partido Obrero, y sus resoluciones serán elevadas al mismo para
consideración y análisis de todo el partido.
Participarán compañeros de 19 provincias:
Tucumán, Catamarca, Salta, Jujuy, La Rioja, Santiago del Estero,
Formosa, Chaco, Misiones, Mendoza, San Luis, Córdoba, Santa Fé,
CABA, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Buenos
Aires (con alrededor de 40 distritos bonaerenses representados).
Proponemos también la participación de una delegación de docentes
del Partido de los Trabajadores de Uruguay, protagonistas de una de
las principales luchas contra la esencialidad en nuestro continente
el año 2015.
El congreso sesionará en medio del cambio
del régimen político, en la transición del derrumbe del
kirchnerismo y el intento del macrismo de poner en pie una nueva
forma de regimentación de las masas. En un escenario de crisis
fiscal, de bancarrota del Banco Central y de recesión económica
dejada por los K y de descomposición del Estado capitalista en todos
sus aspectos (político, económico, judicial, de los organismos de
represión, etc ).
1.- El cuadro general:
A pocos días de iniciar su mandato el macrismo dejó en claro su
objetivo de hacer recaer toda la crisis económica sobre la clase
obrera y de rescatar a la clase capitalista beneficiaria del período
kirchnerista. Por medio de decretos de necesidad y urgencia y de los
otros, devaluó un 40% la moneda, quitó retenciones a los
exportadores, convalidó la carestía de fines de diciembre, anunció
el pago de los compromisos con los buitres, etc. A pesar de ello, los
monopolios capitalistas le exigen ir más a fondo, devaluar más aún
la moneda y resolver el déficit fiscal, avanzar con los despidos
(estatales y privados) para disciplinar a los trabajadores e imponer
una paritaria a la baja, del 20/25%, -en palabras del ministro de
hacienda Prat Gay-, para quien los despidos masivos en la
administración pública son sacarse “la grasa que le sobra al
Estado”.
En este sentido, los despidos masivos en la
provincia de Buenos Aires están en el centro de la ofensiva política
del macrismo en su faena ajustadora. El otro punto es la rosca de
Vidal con la que logró la aprobación del presupuesto bonaerense
(con apoyo mayoritario del kirchnerismo), que se trata de una
política de hipotecamiento a futuro por la que el capital financiero
reclamará contrapartida: pauta de aumento salarial a la baja,
reducción de los recursos destinados a educación, salud y vivienda,
aumentos de tasas municipales que ya están en marcha, etc.
Finalmente, con el quórum que le brindó todo el pejotismo y con el
voto unánime del kirchnerismo en general, Vidal aprobó su
presupuesto. El kirchnerismo en
todas sus variantes es una fuerza orgánica del Estado capitalista y
actúa en función de la clase a la que representa.
En medio de los despidos en el Estado, más de 20.000 según Ate
verde, entregaron a los trabajadores a cambio de los 10.000 millones
de pesos para los intendentes pejotistas. El interés común de clase
se evidenció además en que los intendentes del Fpv promueven
despidos en un nivel tan masivo como Cambiemos, como en Malvinas
Argentinas u otros tantos distritos y provincias.
Pero junto con eso, en su primer mes, la
crisis política y económica mostró a un gobierno “en el
tembladeral”. De la crisis de las fugas del penal de General Alvear
el gobierno salió golpeado. No sólo puso de manifiesto el grado de
descomposición de los aparatos judiciales y represivos del Estado,
sino también la incapacidad de fondo del gobierno de Macri para
vérselas con esta crisis. La razón es que la coalición de gobierno
forma parte también de este orden estatal y social. El primer mes
mostró todas las contradicciones explosivas sobre las que se
asienta Macri y el carácter de advenedizos del poder que deberán
pactar con los mismos que han denunciado en la campaña electoral
para poder gobernar y hacer pasar el ajustazo antiobrero que exige
la clase capitalista.
El movimiento obrero, por su lado, ha
salido a responder a los ataques de los capitalistas y del gobierno,
atado de pies y manos: La lucha de Cresta Roja, de los trabajadores
de Siderca contra los despidos, los bonos de fin de año arrancados
en numerosas fábricas y gremios (bancarios y camioneros entre
otros), ocurren en medio de una profunda tregua sindical. Los
aceiteros lograron una gran conquista: un bono de 15.000 pesos. Pero
los despidos en el Estado están pasando en masa. La reversión
lograda en Coronel Suárez en una seccional municipal clasista es de
todo punto de vista una excepción con algunas pocas situaciones
similares. El reflujo impuesto por todas las fracciones de la
burocracia en el período precedente, las expectativas puestas en
Macri, Scioli o Massa, son un contrapeso que la izquierda
revolucionaria debe remover con planteamientos y agitación política.
Algunos retrocesos de despidos iniciales
como los de Siderca, las asambleas petroleras de masas, el
reagrupamiento del Sitraic en Santa Cruz o la mencionada lucha de los
municipales de Coronel Suárez, muestran por sobre todo una ruta de
maduración en la que debemos intervenir y que debemos desarrollar,
combatiendo toda ilusión en la burocracia. La política de que “la
burocracia se ponga a la cabeza”, como las exigencias vacías de
paros que no ocurren ni ocurrirán sino por una presión excepcional
de las bases, son políticas seguidistas que debemos combatir en el
seno de la izquierda y el clasismo.
2.- La burocracia sindical:
Como se señaló, la burocracia profundizó la tregua que ya tenía
con el gobierno cristinista. La Cgt de Caló no dijo ni una palabra
ante los despidos masivos, la devaluación y demás; Moyano lanzó
una humorada: “nos quieren meter miedo con los despidos para
imponernos topes en las paritarias”, dijo.
El “plan de lucha” de la Cta de Baradel
y Yasky fue “conseguir” el repudio de la Confederación Sindical
de trabajadores y trabajadoras de las Américas (CSA) (¿), anunciar
que iba a hacer la denuncia a la Oit y señalar que con “estas
medidas” contra el gobierno “están en pie de lucha para
arrancarle a Macri una comisión que analice los despidos”. La
defensa de los puestos de trabajo, y la denuncia de la precarización
laboral no figura en su programa. Pura demagogia, para encubrir su
colaboración con el macrismo y pretender postularse para dirigir la
“resistencia” al gobierno neoliberal.
La burocracia sindical es parte del régimen
político y se acomodará, corriendo su misma suerte, a condición de
que los sectores clasistas y la izquierda revolucionaria nos demos la
organización y el programa independientes. Preparar, preparar y
preparar es la tarea en todo el movimiento obrero. Impulsar cada
lucha, asambleas, ocupación de las fábricas que despidan. Algunas
derrotas iniciales pueden apenas marcar una exploración de las
masas, como en otros períodos históricos. La aplicación del ajuste
a fondo requeriría una derrota asimilable a los la de los 90, lo que
no resultará fácil en absoluto, y donde la izquierda revolucionaria
tiene un posicionamiento muy diferente.
La crisis de la burocracia se evidencia
también en su incapacidad para unirse en una sola Cgt, detrás del
nuevo gobierno, por sus luchas de camarillas, por sus peleas por la
caja y el favor oficial y por las divisiones del peronismo. El pacto
social no anduvo hasta ahora, pero con la tregua total de la
burocracia de fondo, salió por decreto: El macrismo intenta avanzar
con los despidos, anuncia que las paritarias tendrán el tope del
20/25 % y hasta las elimina, como hizo Vidal con las paritarias de
los trabajadores municipales en la provincia de Buenos Aires. La
burocracia petrolera ha ofrecido entregar las paritarias a cambio de
que no haya despidos, una posición gravísima que tendremos que
combatir con una fuerte agitación política, puesto que la entrega
de las paritarias sólo preparará mejor los despidos.
La menor confianza en la burocracia
sindical, especialmente kirchnerista, es el mayor crimen contra la
clase obrera, cuando existe un momento histórico para darle golpes
decisivos y recuperar nuestras organizaciones obreras.
3.- La izquierda, la trampa del Frente
Antimacrista, y la oposición docente: Una
parte de la izquierda, en particular los morenistas, han dado un
claro giro hacia el kirchnerismo, en el cual ven o dicen ver un
aliado para enfrentar al gobierno macrista. En realidad, al viejo
estilo estalinista esperan capitalizar en la base kirchnerista,
pegados a ellos, lo cual tradicionalmente ha contribuido a la
recomposición de las corrientes de la burguesía, en este caso del
nacionalismo.
En un encuentro de sindicatos, seccionales
y comisiones directivas clasistas y de izquierda realizado el 11 de
diciembre pasado en la AGD, con sectores como el cuerpo de delegados
de la línea 60, el Sutna San Fernando, la AGD, la seccional Haedo de
la UF, el Sitraic, etc, quien más lejos llegó con este planteo fue
el Pts: Frente único Antimacrista con la burocracia de Yasky. Luego
hizo ese mismo planteo el Mas, en el acto de la Plaza de mayo el 22
de diciembre. En docentes, más o menos explícitos, todo el arco
morenista, desde Opinión Socialista hasta Is, pasando por el Pts,
Pstu, sectores de Rompiendo Cadenas (Gandolfo), son tributarios de
esta postura filo-k.
El Pts ha ido a fondo, sacando en Izquierda
Diario ( LID) un reportaje a Baradel en el cual colocan al burócrata
como cabeza de la lucha.
El rastrerismo detrás de la burocracia
sindical que ahora “lucharía”, detrás del nacionalismo burgués,
lo justifican con la histórica política del “embrete”, que
sirve para recrear las ilusiones en el nacionalismo. El intento de
desplazar al PO y a nuestras agrupaciones sindicales de su influencia
política sobre el movimiento obrero en los gremios en los que
militamos, tiene este contenido de fondo. Y, precisamente, hemos
conquistados los principales lugares de dirección por el desarrollo
de una política de independencia de clase. (Sitraic, Sutebas
Combativos, Agd, Sutna, gráficos, Ate-Mendoza, Sipreba, Aten,
Amsafe, Atrana, Foetra, etc).
En Ctera, y particularmente en Suteba, ese
giro se ha canalizado por medio del intento de enviar una carta de
los Sutebas combativos a Baradel, planteándole ni más ni menos que
“ahora” nos pondríamos a su disposición para avanzar en la
unidad de acción. El llamado de Baradel al “diálogo” con la
oposición multicolor, se parece al diálogo de Macri, es para
encubrir la entrega de la paritaria y frente a todo el ajuste.
Conlleva el planteo de que el kirchnerismo “lidere” la oposición
que debe liderar el clasismo.
Tribuna rechazó el convite en ese
congreso, denunció que detrás de su política sólo vamos a una
derrota, que eran responsables del acceso del macrismo al poder,
reclamó la convocatoria de un congreso de delegados provincial con
mandato para votar un plan de lucha y un programa independiente de la
clase obrera para enfrentar el ajuste.
De la misma forma, ahora hemos rechazado la
agachada de enviar una carta de este tipo, y planteamos que
enfrentar al gobierno macrista es exigir
paritarias libres y un salario básico de $ 10.000, un salario
inicial igual a la canasta familiar y un 40 % de aumento en todas las
categorías, e impulsar un plan de lucha dirigido por el plenario
provincial de delegados hasta obtener las reivindicaciones.
La rotunda respuesta de TD a tal propósito
ya hizo que bajara el entusiasmo de los promotores y comenzaran a
justificarse y vacilar. La carta no fue enviada, pero no revisaron su
política. Ir hasta el final en este primer nuevo intento de
cooptación de la burocracia yaskysta, desprestigiada, significa
romper la Multicolor (en la cual TD es la corriente mayoritaria), un
suicidio político que los conduciría a perder sus propios lugares,
y a la desaparición de estas corrientes del Suteba. Pero no
descartamos por completo que pueda ocurrir, al menos de parte de
alguna de estas organizaciones, como lo hizo el PCR en el pasado. El
oportunismo de estas corrientes se ha exacerbado cuando el
kirchnerismo entregó sin pena ni gloria los despidos masivos y dio
voto unánime de todo el Fpv al presupuesto de Macri-Vidal.
El seguidismo a la burocracia del PTS es
indisimulado. Para ellos, “los cambios en la marea de la política
parecen traer ahora a un ‘viejo conocido’ a la misma orilla de
los que se plantan hace años. Será la propia base docente la que
deberá obligar a Baradel y al
resto de los dirigentes sindicales
(negritas nuestras, no se conforman con Baradel, quieren a toda la
burocracia) a ponerse a la cabeza , desplegando todo el poder de
fuego de los sindicatos, erigiendo un verdadero bastión de
resistencia (¡!) a los embates que más temprano que tarde(¡!)
comenzó a sufrir la clase trabajadora” (LID, 15/1/16).
Una vergonzante reivindicación del
kirchnerismo y un llamado a darle todo el poder en los sindicatos a
la burocracia que entregó a la docencia y a todo el movimiento
obrero durante 12 años, pavimentando el acceso del macrismo al
poder.
Este bloque no es homogéneo ni mucho
menos. Ante la delimitación tajante de TD la mayoría vacila. Por
otro lado, el PCR (Azul y Blanca), Sutef (Crcr), sectores del
Encuentro Colectivo (La Fosatti de Matanza, probablemente el
Colectivo de La Plata) se han alejado, de diferentes maneras, de
estas posturas. En sindicatos como Amsafé-Rosario, donde los que
rompieron con la directiva combativa ahora forman lista con la
Celeste contra la Multicolor en las próximas elecciones, plantear el
seguidismo a Sonia Alesso es inaceptable. ¿Roby sí, pero Sonia no?
Lo mismo ocurre en Atén: ¿Llamarán el Pts o Is a la unidad de
acción con el K de Guagliardo? ¿O en Adosac unidad de acción con
Alicia Kirchner y la burocracia sindical de De Petris?
La lucha y la delimitación política de
TD, su progreso en el seno del activismo, son tareas esenciales en
el período que se abre. Debemos ser implacables en la delimitación
del kirchnerismo y de la burocracia sindical.
4.- la paritaria docente: Es
el primer desafío. Más que nunca, tiene un carácter estratégico
para el macrismo, porque marcará el camino para el conjunto de los
trabajadores.
Lejos de enfrentar al gobierno , la
burocracia de Ctera saludó la buena voluntad de Bullrich y de Vidal.
Aplaudió el “gesto” de Bullrich de llevar el salario inicial de
siete provincias al valor del miserable salario mínimo y vital de $
6.060, que el propio kirchnerismo les había negado. Una caricatura,
si se quiere, del “gesto” de kirchner y Filmus cuando fueron a
resolver el conflicto salarial de los docentes de Entre Ríos.
La secretaria de Ctera, Sonia Alesso, y
Baradel plantearon un vago 40% de aumento en la última reunión con
las autoridades educativas, que hoy ya no defienden, como dice el
articulista de Clarín del 16.01. Tampoco en el elogioso reportaje
que el Pts le hace en LID. En esa nota, la burocracia mantiene en
secreto cualquier cifra y plantea hacer una paritaria que se “reabra
en mayo-junio”, un verso que ya conocemos. Tampoco enfrentan la
creación macrista del Instituto de Evaluación de Calidad, que tiene
por objetivo instaurar el salario “por mérito”, el presentismo y
la anulación de los estatutos docentes, programa que comparte con su
princpal aliado, el Frente Renovador, y con su principal “opositor”,
el FpV.
Baradel-Alesso van por un “acuerdo
corto”, que luego termina siendo largo, para hacer pasar una
paritaria a la baja, mientas hacen demagogia diciendo que defienden
paritarias libres.
Tribuna Docente sale con un planteo
general, 10.000 de básico,
inicial igual a la canasta familiar y aumento del 40 % en todas las
categorías, indexado mensualmente por inflación.
(En el reportaje de LID, Baradel rechaza la indexación, nada menos
que en medio de una inflación galopante y el anuncio del gobierno de
que en febrero se viene un tarifazo no menor al 130 % en los
servicios!). El programa se completa con el fin del trabajo
precario, triplicar el presupuesto educativo, defensa del 82 % móvil
para las jubilaciones y la defensa de los regímenes jubilatorios
provinciales, fin del impuesto al salario, basta de vaciamiento de
las obras sociales, obras de infraestructura en las escuelas bajo
control de docentes y padres. Un programa obrero de salida a la
crisis en el ámbito de la educación, plenarios de delegados
provinciales y asambleas generales sin restricciones y plan de lucha
bajo el control de la docencia. No a la esencialidad. Defensa del
derecho de huelga. Plenario de delegados de escuela con mandato para
establecer nuestro programa frente al gobierno y un plan de acción
de todos sindicatos recuperados.
En el reportaje ya citado a Baradel le
preguntan si el “piso” va a ser debatido en asambleas de base en
las escuelas. La respuesta es que eso lo va a resolver el plenario de
secretarios generales.
Debemos dirigirnos con un planteo
explicativo al conjunto de la docencia, que permita madurar un plan
de lucha, especialmente en lugares como la provincia de Buenos Aires,
donde una porción mayoritaria votó por el macrismo, agobiada con la
barbarie del kirchnernismo en el plano educativo. Pero también donde
una extendida vanguardia votó al Frente de Izquierda y ayudó a los
400 mil votos obtenidos.
El derrumbe de la educación es completo, y
el macrismo también es responsable, como lo demuestra la realidad
educativa en la CABA. En Buenos Aires, Vidal es incapaz de levantar
el cuadro dejado por Scioli. Ha mantenido en líneas generales el
mismo entramado de funcionarios salvo en la cúpula de la DGCyE. Es
una política de acuerdo con el aparato que dejan los K, la
burocracia sindical y los intendentes pejotistas del conurbano y la
provincia que sólo augura futuras crisis. El nuevo ministro de
educación bonaerense, Finocchiaro, es el mismo que desconoció a los
delegados del sindicato Ademys en la CABA. El plenario provincial de
delegados de los sutebas debe dar continuidad al plan de lucha contra
el ajuste que votó en diciembre, antes del balotaje.
En provincias como Tierra del Fuego,
Neuquén, Santa cruz, la situación frente a las paritarias o las
mesas salariales es muy conflictiva. Deberemos evaluar en el congreso
con exactitud a qué tipo de comienzo de clases nos enfrentaremos,
provincia por provincia, que dependerá de los topes que pretenda
establecer Bullrich en la paritaria nacional y los gobernadores en
cada una de sus provincias.
En segundo lugar, debemos demoler el papel
del k y de la burocracia de Ctera, que ya en el pasado fue sostén
de la política antieducativa del macrismo antes de que accediera a
la presidencia, como lo testimonia su política de paz social con
Macri durante sus ocho años de gobierno en la CABA.
En tercer lugar, esclarecer sobre la
política educativa del macrismo, que hemos denunciado a lo largo de
toda la campaña electoral y enfrentar los avances privatistas y de
desconocimiento de los estatutos docentes que quieren aplicar
provincia por provincia.
En cuarto lugar, defender la política de
frente único de los sectores combativos de la docencia detrás de
este programa, que ya se puso en práctica en diciembre pasado, con
la marcha educativa nacional que terminó en Plaza de Mayo, con el
Sutef, los sutebas, Amsafé-Rosario, Ademys, la AGD-UBA, Adosac, etc.
Y exigir a todos los gremios docentes que se sumen a un plan de lucha
único, en defensa de la educación pública y de los reclamos de la
docencia, sin divisiones ni paros aislados.
Promovemos en marzo una nueva marcha
nacional educativa detrás de este programa y de la anulación de las
condenas de los docentes y camioneros de Tierra del Fuego, y el fin
de todos los procesamientos a los luchadores. La campaña por la
anulación de las condenas a los docentes fueguinos es una cuestión
central para Tribuna Docente, ya que combina una cuestión de
principios, con la defensa de las direcciones combativas y de las
organizaciones sindicales en forma integral.
Promovemos también la unidad del conjunto
de los sindicatos, seccionales y agrupaciones combativas de todo el
país, que presente públicamente a toda la docencia una propuesta
común frente a la paritaria, y un plan de acción único en todo el
país. Un encuentro opositor nacional que se plante frente al
gobierno y la Ctera con una política para el conjunto de la
docencia.
5.- Por una nueva dirección en Ctera y
en los sindicatos docentes provinciales: La
tarea del gobierno macrista es imponer un ajuste histórico, otra
vez, a la clase obrera argentina. Imponer un ajuste “a la griega”,
hacer retroceder el salario, la ocupación y las condiciones
laborales drásticamente, y abrir un nuevo ciclo de la mano de la
recolonización económica del capital extranjero.
La burocracia sindical está jugada como un
gran pilar de la gobernabilidad capitalista, más allá de sus idas y
vueltas, de las maniobras o de las crisis que deba enfrentar.
La burocracia celeste no es ajena a esta
perspectiva.
En este cuadro, en el 2016 hay elecciones
en sindicatos estratégicos: Amsafé, Atén, Ademys. Y en el 2017,
son las elecciones en Suteba, sindicato en el que ya se largó la
carrera electoral como se ve por el intento de la burocracia de
debilitar a la oposición multicolor. También, en 2017 son las
elecciones de Ctera y en el Sute de Mendoza. En el trascurso del
congreso de TD completaremos el cronograma electoral con otras
provincias.
Nuestro planteo en todas ellas es poner en
pie un frente único de la docencia combativa para defender los
sindicatos recuperados y para expulsar a la burocracia de Ctera y de
sus entidades de base, detrás del programa de la Multicolor en todo
el país. Más que nunca, defendemos al interior de este frente único
el papel de TD, garante de ese programa y de esa perspectiva. Un
aspecto importante será la lucha contra el faccionalismo de las
sectas.
En Amsafé-Rosario vamos por la defensa de
la seccional combativa. La burocracia celeste ha conformado un frente
con la agrupación del un ex secretario general de la seccional,
Couselo, que se pasó al yaskysmo, y que se quieren presentar como la
renovación de Amsafé-Rosario. Existe en principio un consenso
todavía sin detalles de parte de las fuerzas que componen la
directiva antiburocrática de integrar a las corrientes que están
por fuera , acorde a su grado de representación (Is, Pts, Mst). Hay
que aclarar que los dos primeros, que en Suteba plantean la unidad de
acción con Baradel, en Amsafé-Rosario acusan a la directiva
combativa de adaptarse a la celeste de Alesso. TD presentará además
lista en otros cuatro distritos: San Lorenzo, Reconquista, Santa Fe y
San Jerónimo, lo cual es un avance de nuestra agrupación. Las
elecciones son en junio y las listas deben presentarse en abril.
En Atén está planteado poner en pie un
frente como la Multicolor, que ganó las elecciones de consejeros
escolares, delimitándonos del faccionalismo visceral dentro y fuera
del (FURA), que permitió la recuperación del sindicato por la
celeste por la presentación de una lista divisionista de parte de IS
y el abandono de hecho del frente de parte de la agrupación del ex
secretario general. Un frente único en base a las seccionales
opositoras y a las agrupaciones de la izquierda plantea la defensa de
las seccionales y la disputa por la recuperación de Aten provincial,
frente a un inmovilismo completo de parte de la burocracia en todo el
mandato celeste. En febrero, las seccionales opositoras de Aten han
convocado a un plenario provincial para intervenir en la lucha
salarial, en un cuadro de mucha bronca por la degradación del
salario, las prestaciones de la obra social y las condiciones
laborales y el estado de las escuelas.
En Ademys, se plantea la continuidad de la
directiva Multicolor, pero en un cuadro de retroceso de IS, que
dirige el gremio. Se partió recientemente la agrupación ultra
centrista que integran (Lista de Maestros), que fue abandonada por
Rompiendo Cadenas. La ruptura no es clara de ninguna de las partes.
Previo a esta ruptura, IS promovió incluir en el nuevo estatuto de
Ademys que se aprobó a fin de año, una cláusula que planteaba que
los miembros de la directiva no podían tener doble afiliación (En
Ademys y en ute), lo que estaba claramente dirigido contra nosotros –
principal oposición en Ute-, y a otros integrantes de la Multicolor,
y en favor de la lista Violeta de la Cta Micheli, quienes dirigieron
el sindicato hasta su recuperación por la Multicolor. La tendencia
de IS a convertir a Ademys en un aparatito separado de la lucha por
recuperar el gran sindicato de la capital (Ute) es total. En su
momento, su principal referente, Laura Marrone, se pronunció a favor
de integrar la fantasmal Federación Nacional Docente (Cterita).
Deberemos caracterizar en detalle los realineamientos que se están
produciendo en Ademys.
Suteba es el gran desafío. En base a las
nueve seccionales muticolor, que llegaron a arrastrar a paros masivos
a la docencia del conurbano y crecientemente del interior de la
provincia el año pasado, la defensa de ese reagrupamiento y de la
política que le hemos impreso hasta ahora, permite plantearnos una
lucha por la recuperación del sindicato provincial. Cómo intervenga
la Multicolor en el cuadro de esta paritaria y frente a la burocracia
K será crucial. Igual que en el resto de las provincias, defendemos
el frente único y la independencia de la burocracia y el
nacionalismo. Tribuna
debe empeñarse en una gran tarea de agitación, propaganda y
reclutamiento que permita garantizar esta perspectiva. Con el mismo
criterio, debemos prepararnos para las elecciones de Ctera.
Nos orienta la lucha por una nueva
dirección en el movimiento obrero, la expulsión de la burocracia y
la puesta en pie en todos lados de frentes únicos de los sectores
combativos , para que la clase obrera intervenga en la crisis que se
avecina, lo que a su turno reforzará la construcción de su propia
alternativa política, de poder.
6.- La dirección de TD:
La dirección de TD electa en su último congreso no ha funcionado o
lo ha hecho irregularmente. Luego de las elecciones nacionales, se
reconstruyó el funcionamiento de la mesa de dirección, que permitió
sacar una segunda edición de la revista nacional, organizar la
movilización nacional educativa y el folleto de Rieznik de fin de
año. Pero la intervención en este vasto panorama y la extensión de
TD a las provincias en las que no estamos, la salida periódica de la
revista nacional, el progreso en el reclutamiento, exigen de un
funcionamiento regular de la dirección de TD y garantizar una
reunión cada dos meses de una dirección de todo el país que se
elija en el congreso.
En base a estos ejes centrales
estableceremos las comisiones que funcionarán en el congreso y que
daremos a conocer con un cronograma de funcionamiento del congreso en
nuevo informe.
Las regionales deben comenzar a discutir el
plan de movilización hacia el congreso. Nos proponemos superar los
más de 500 compañeros que asistieron el año pasado. Hacia el
congreso, establecemos un plan de charlas y pre-congresos previos en
varias provincias, como Santa Fe y Salta, ya programados, y los que
deben incluirse.
Dirección de Tribuna Docente – enero
2016
